En España vivimos en una monarquía parlamentaria desde que se produjo la transición del periodo fascista a la democracia, hasta aquí todo es sencillo, sobre todo para los que nacimos ya en periodo democrático. Los ciudadanos eligen a un partido político en elecciones y éste se encarga de proporcionar los cargos electos mediante una proporción relacionada con los votos recibidos, regida por la famosa ley de Ohm.
Aquí empiezan los problemas, los puestos políticos no
los elegimos los ciudadanos, los eligen los partidos políticos, es una
democracia representativa, pero los partidos pueden no funcionar de forma
democrática, aquí la primera contradicción, en fin, que los diputados nos son
impuestos por los partidos.
Los políticos son personas normales como cualquiera,
pero cuando se da un caso de corrupción, al tener tanta repercusión mediática,
la magnitud del delito es mayor, sobre todo porque son los que ostentan el
poder, hacen y deshacen a sus anchas, y en España, desde que tengo uso de razón
hemos tenido corrupción en todas las instituciones y por todos los partidos, la
lista es larga.
Esto quiere decir que el sistema no funciona, no lo
creo, solo creo que tenemos que mejorarlo, intentar que los políticos sean
gente honesta, competente y que trabajen por y para los ciudadanos, menuda
utopía, pero es lo que pienso, con más transparencia, con mejores controles para
detectar fraudes y detectar la corrupción.
Otro asunto es la competencia por el poder, los
partidos políticos se convierten en equipos de fútbol, y hacen todo lo que esté
en su mano para conseguir permanecer en el poder o llegar a él, según se mire.
Esto es una desgracia, los ciudadanos asistimos muchas veces ipertérritos a
acusaciones infundadas, subidas de tono, gresca dialéctica, cuando no
descalificaciones e insultos. ¿Nos merecemos esto? No, estoy convencido.
El objetivo de los políticos son los ciudadanos y
con esto en mente elaboran unos principios y programas electorales que dicen
que cumplirán cuando lleguen al poder, pero es rara vez ocurre, el primer
ejemplo que se me viene a la cabeza es el de Obama que dijo que iba a cerrar
Guantánamo y no lo hizo, o el PSOE que dijo que iba a derogar la ley mordaza y
tampoco lo han hecho, mentiras, falsas verdades, lo peor de lo peor, vamos, que
nos engañan.
Tampoco soy un erudito en política, el conocimiento
que tengo es de andar por casa, pero seguro que hay algunos que piensan como yo.
Ahora se abre el debate de la monarquía después de haber conocido la doble vida
corrupta que llevaba el monarca Don Juan Carlos de Borbón y de su yerno. Los
partidos mayoritarios han cerrado filas en torno al hijo del Rey Emérito, pero
no sé si eso lo que más le conviene al país, ya que la monarquía se hereda y en
mi opinión debería ser el pueblo el que libremente decidiera que clase de
representante institucional deberíamos tener, ya se verá qué ocurre.
Como periodista me molesta la sobrerrepresentación
mediática que reciben los políticos, cualquier cosa que hagan sale en los
telediarios y en la prensa, es bastante cansino, la sociedad civil es muy rica
y hay muchas historias que deberían ser contadas y aparecer en la agenda
mediática, parece que la prensa sigue como un perro a su dueño, los políticos,
es muy cansado, como decía antes.
También pienso que las personas no somos siempre de
derechas o de izquierdas, en unas cosas pensamos como si fuéramos de derechas y
en otras cosas como si fuéramos de izquierdas, somos personas complejas con
intereses y pensamientos diversos, pero tenemos que amoldarnos a lo que nos
ofrecen los partidos políticos, es muy dicotómico, todo o nada, no me extraña
que haya descontento con la clase política.
Me estoy alargando en este post, porque la política
juega un papel preponderante en nuestras vidas, pero no voy a alargarme más,
aunque se me quedan cosas en el tintero, espero que esta entrada os haga pensar
de forma crítica sobre la política, que tengáis una opinión más allá de las que
nos intentan imponer los medios de comunicación y los políticos, gracias por
leerme, un abrazo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario